Seat continúa apostando por el segmento crossover con el nuevo Arona
El tercer lanzamiento de la marca española en 2017, tras el restyling del León y la llegada de la quinta generación de Ibiza, es un eslabón más en la ofensiva de producto realizada por SEAT, en la que también se encuentra el Ateca y el futuro SUV de 5 o 7 plazas que verá la luz en 2018.
Precisamente, el nuevo SEAT Arona se encuadra dentro de la gama SUV como el hermano pequeño de la familia, combinando las ventajas de sus compactas dimensiones en ciudad, con las cualidades de los SUV para salir de la urbe.
El SEAT Arona mide 4.138 mm de longitud, lo que supone 79 mm más que el nuevo Ibiza. Sin embargo, la altura es el elemento que mayores diferencias establece, ya que el Arona es 99 mm más alto. En consecuencia, el nuevo SEAT Arona ofrece no solo una mayor altura libre al suelo para poder aventurarse fuera del asfalto sino que, además, mejora todavía más el espacio para la cabeza tanto en las plazas delanteras como en las traseras y, sobre todo, un maletero más amplio, que llega a los 400 litros de capacidad. Y un aspecto muy importante, la banqueta de los asientos está 52 mm más elevada, lo que aporta una doble ventaja. Primero, una posición de conducción más alta para mejorar la sensación de control del tráfico, y segundo, facilita enormemente la accesibilidad para entrar y salir del coche. Los pasajeros también van sentados 62 mm más altos. Delante hay 37 mm más de altura y detrás, 33. La suspensión eleva la carrocería 15 mm más que en el Ibiza y el parabrisas es ligeramente más vertical para ganar espacio en altura dentro del habitáculo.
La clave para conseguir esta mejora en habitabilidad y comportamiento dinámico, es la última tecnología que el Grupo Volkswagen ha desarrollado sobre su plataforma MQB (Modular Quer Baukasten). La plataforma MQB A0 permite una mayor flexibilidad de fabricación, una implementación más robusta y diferentes modelos con diferentes tipos de carrocería dentro del mismo segmento. También se pueden lograr diferentes configuraciones de distancia entre ejes.
Todos los motores disponibles en la gama del nuevo SEAT Arona tienen inyección directa, turbocompresor e intercooler y cuentan con sistema Start&Stop.
En gasolina hay tres motores diferentes para elegir, todos con bloque de aluminio. El primero es el 3 cilindros 1.0 TSI de 95 CV, que va unido a una caja de cambios manual de cinco velocidades. A continuación tenemos este mismo motor pero en su versión de 115 CV, que cuenta ya con un cambio manual de seis marchas o con el DSG de doble embrague y siete velocidades. El tercero es el nuevo 1.5 TSI de cuatro cilindros con 150 CV -con tecnología de desconexión activa de cilindros- que queda reservado para el acabado FR y está unido al cambio manual de seis marchas. En diésel, el eficiente y fiable 1.6 TDI estará disponible con 95 y 115 CV. La versión de 95 CV se puede escoger con cambio manual de cinco velocidades o DSG de siete; el de 115 CV, con cambio manual de seis.
Por último, a mediados de 2018 llegará a la gama Arona el motor 1.0 TSI de 90 CV alimentado por Gas Natural Comprimido (GNC). SEAT es el primer fabricante en ofrecer un motor de este tipo en esta clase de los crossover compactos.